Las zonas económicas en Quintana Roo y Baja California Sur así como la Frontera Norte son las opciones que el gobierno federal analiza para aplicar un millón de vacunas contra COVID-19 de Johnson & Johnson que Estados Unidos enviará a nuestro país.
En conferencia, el subsecretario de prevención y promoción de la salud, Hugo López-Gatell, dijo que el objetivo es reducir la afectación al turismo y otras actividades económicas en Quintana Roo y BCS, entidades que van al alza en sus epidemias y comienzan a retomar confinamientos.
“En este caso donde la actividad depende del turismo, regresar a confinamientos estrictos puede ser muy perjudicial. Ahí puede servir el papel de las vacunas para ayudar a que los confinamientos no sean tan estrictos”, añadió desde Palacio Nacional.
La intención es similar en la frontera norte, donde muchas familias dependen del trabajo en las maquiladoras y cerrarlas en caso de un repunte de la epidemia sería grave a nivel social y económico, describió López-Gatell.
“También se ha considerado la franja fronteriza, y podríamos coordinar acciones de prevención de ambos lados de la frontera México y EU”, mencionó el subsecretario.
Por la mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que México recibirá un millón de vacunas de Johnson & Johnson por parte del gobierno de Estados Unidos.
Aún no se sabe la fecha de llegada de estas vacunas, aclaró Hugo López-Gatell.
Y alistan vacunación a personas con discapacidad.
El subsecretario López-Gatell dijo que la próxima semana se presentarán detalles sobre la vacunación prioritaria a personas con discapacidad y a diversos grupos en situación de vulnerabilidad.