Un informe respaldado por la ONU publicado el lunes indicó que se prevé una hambruna de aquí a mayo en el norte de la Franja de Gaza, tras más de cinco meses de guerra que han devastado el territorio palestino, matado a miles de personas y cortado los suministros.
En todo el enclave asediado, el número de personas que se enfrenta a una «hambruna catastrófica» ha aumentado a 1.1 millones, cerca de la mitad de la población, según el informe de la Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria (CIF, por sus siglas en inglés).
«Se proyecta ahora una hambruna inminente en el norte de Gaza y en las gobernaciones de Gaza, y se espera que se manifieste durante el periodo de proyección, desde mediados de marzo de 2024 hasta mayo de 2024», señaló el informe.
La evaluación de la iniciativa respaldada por Naciones Unidas -una escala utilizada por agencias de la ONU, organismos regionales y grupos de ayuda- se produce en medio de la presión mundial sobre Israel para que permita la entrada de más ayuda humanitaria en el enclave de 2.3 millones de personas.
Unas 300,000 personas están aisladas por los combates en el norte.
La Unión Europea acusó el lunes a Israel de provocar la hambruna y utilizar el hambre como arma de guerra, afirmaciones que Israel rechaza alegando que no ataca a civiles y que sólo está interesado en eliminar al movimiento islamista Hamás.
El número de personas consideradas en riesgo de hambruna catastrófica en Gaza es casi el doble de la cifra comunicada en diciembre, cuando se publicó la última CIF sobre Gaza y ya había un récord de hambre.
«Desde mediados de marzo hasta mediados de julio, en el escenario más probable y bajo el supuesto de una escalada del conflicto que incluya una ofensiva terrestre en Rafah, se espera que la mitad de la población de la Franja de Gaza (1.11 millones de personas) se enfrente a condiciones catastróficas», según la CIF.
(Con información de El Economista)