Existen irregularidades en la elaboración, etiquetado y comercialización de productos alimenticios en el mercado mexicano, como queso, yogurt natural, yogurt para beber, salchicha, jamón, bebidas “energéticas”, mantequilla, lácteos fermentados, mermelada y cajeta, según determinó la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) a través de diversos estudios de calidad, tan solo en 2020.
El pasado 13 de octubre, la Secretaría de Economía, en coordinación con la Profeco, ordenó la suspensión inmediata de la comercialización de productos denominados como “queso” y “yogurt natural” que incumplen con las Normas Oficiales Mexicanas. Entre las marcas sancionadas se encuentran Philadelphia, Aurrera, Fud, Nochebuena, Zwan, Caperucita, Precissimo, Lala y Danone.
Esta acción representó una aplicación “histórica” de la Ley de infraestructura de la Calidad, según afirmó el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla, en la Expo Antad Alimentaria México 2020.
Los supuestos quesos sancionados por la autoridad utilizan la etiqueta “100% leche” sin serlo, sustituyen leche con grasa vegetal, proporcionan menos gramos de los anunciados y no informan el porcentaje de uso de caseinatos. Por su parte, los yoghurts suspendidos faltan a la verdad al promocionarse como “naturales” pues tienen azúcar añadida y no cumplen con el contenido mínimo de leche.
En su estudio de calidad sobre yogures para beber, la Profeco alertó sobre productos que contienen azúcar por encima del nivel diario recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como el Danone Bene Gastro, que con sus 26.8 gramos de azúcares libres representa el 107% de la recomendación diaria. Este producto forma parte de los sancionados en octubre por su indebido etiquetado como “yogurt natural”.
Respecto a los embutidos, mejor conocidos como salchichas, la Profeco determinó que las marcas “hacen lo que quieren” debido a que la norma es antigua y su seguimiento es de carácter voluntario: todos los productos tienen composiciones diferentes a pesar de llamarse de la misma forma. De hecho, a partir del estudio se inmovilizó en el mercado a las marcas de salchicha Fud Cuida-T, Parma Sabori Al Natural, Pepe Salchicha, Duby, Precissimo, Parma Campestre, Aurrera, Burr y Great Value.
El estudio realizado sobre jamones concluyó que si bien los precios en el mercado están relacionados con la calidad del producto, muchas marcas reducen costos utilizando carne recuperada mecánicamente de los huesos y productos no cárnicos como soya, carragenina, almidones o féculas de papa, maíz y chícharo. En este caso, entre las peores evaluadas estuvo Sparta Cocido, señalada por no ser jamón, y Galy, que incumple el porcentaje mínimo de cerdo que debe tener.
Las antes conocidas como bebidas “energéticas”, hoy etiquetadas como bebidas con cafeína, taurina u otros ingredientes, también superan la cantidad de azúcar diaria recomendada por la OMS, pero además utilizan jarabe de maíz de alta fructosa como sustituto de ésta. A pesar de las altas cantidades de cafeína, el principal problema con estas bebidas es que la taurina y otras sustancias añadidas, como la glucuronolactona, no están reguladas por la normatividad mexicana.
En el caso de las mantequillas, la Profeco se encontró con publicidad engañosa: productos que no son mantequilla (como Chipilo, Selecto Brand y Soriana) pues están hechos con grasa vegetal o no son 100% de leche de vaca, y productos que incumplen la norma pues exceden el 60% de grasa (Gloria reducida en grasa, Great Value y La Abuelita). Los productos en falta fueron sancionados y sujetos a actos administrativos por infracciones a la ley.
Respecto a los lácteos fermentados, la marca Epoca Cool, en sus presentaciones de sabor original y sabor fresa, llamó la atención de los analistas, quienes afirmaron que los productos no comprueban contener los microorganismos Lactobacillus casei y Lactobacillus helveticusque ostentan en la etiqueta. “Si lo que buscas es un producto lácteo con probióticos, estas marcas no son la mejor opción”, consideró la publicación.
La Profeco llamó la atención de la Federación Mexicana de Diabetes por otorgar el logo de su aval a la mermelada de fresas sin azúcar McCormick a pesar de no cumplir con el criterio de azúcares simples de la propia asociación. La marca Biolicious no demostró el uso del logo de orgánico de la Sagarpa ni el de Mexicocert, y Tasty Dbs, McCormick y La Costeña resultaron las marcas con menor porcentaje de fruta.
Finalmente, en el estudio de cajetas, se determinó que Casa Adelita Gourmet no cumple con el mínimo de proteína que pide la norma, además de que se anuncia como elaborada a partir de leche de cabra y contiene leche de vaca. También concluyó que las marcas Coro, Casa Adelita y Las Sevillanas no cumplen con el etiquetado debido.