«¡Libertad!» y «¡abajo la dictadura!», fueron los gritos más escuchados en Cuba mientras ocurría una manifestación que se reportó primero en San Antonio de los Baños y que rápidamente se extendió por varios rincones del país, incluyendo La Habana, considerándose un hecho que tomó por sorpresa a todos, especialmente al gobierno de Miguel Díaz-Canel.
¿Cuáles fueron los factores que detonaron la masiva protesta en Cuba?, ¿cómo lo enfrenta el gobierno de Díaz-Canel y la comunidad internacional? y ¿en qué condiciones se encuentra hoy la isla?, en las siguientes líneas te lo responderemos.
Lo ocurrido ayer posiblemente será recordado en la historia reciente de Cuba. Aunque no es la única protesta que ha enfrentado el gobierno de Díaz-Canel en la isla, sí es la que más revuelo generó tanto interno como en el extranjero, dando cuenta de un punto de ebullición social ante las crisis en diversas áreas que pasa el territorio.
Una de las principales afectaciones tiene que ver con la economía. Cuba arrastra una crisis en esa área durante mucho tiempo, que motivó incluso en generar una reforma económica que no ha sido sustentable para todos los habitantes del territorio.
El 1 de enero de este año, se dio a conocer cómo las autoridades devaluaron el peso nacional, incrementaron salarios y pensiones, así como el costo de bienes y servicios; eliminaron subvenciones, redujeron ataduras burocráticas al sector productivo estatal y ampliaron las facultades del empresariado privado y cooperativo.
Sin embargo, desde ese día el gobierno tuvo que realizar correcciones de precios por demandas de los cubanos en esferas claves como el servicio eléctrico. Se buscó controlar el costo de los alimentos llevando a inspectores a las calles, pero aún así no lograron que áreas como el sector agropecuario aumenten el valor de sus producciones.
Además, con la idea del gobierno cubano de desdoblar la moneda local, al sacar el peso convertible, provocó que no todos los productos estén disponibles para la población, debido a que pueden ser adquiridos a través de dólares, poniendo una brecha entre quienes pueden recurrir a esa divisa y quienes no.
La desesperación económica del gobierno de Díaz Canel se vio agravada especialmente con el bloqueo que impuso el gobierno de Donald Trump, dando vuelta la página a los acercamientos que tuvieron durante la administración de Barak Obama, donde el actual presidente de Estados Unidos, Joe Biden, era vicepresidente.
«Las sanciones impuestas por el presidente Trump han bloqueado las remesas de 3 mil 500 millones de dólares anuales, y la pandemia ha cerrado la industria del turismo», dijo a Euronews el profesor de Gobierno en la Universidad Americana de Washington DC, William Leogrande.
La pandemia de covid-19 afectó más a Cuba
Con las duras afectaciones económicas arrastradas por años, Cuba también sintió fuertemente la pandemia del coronavirus, donde la suspensión de vuelos a nivel internacional por la extensión del covid-19 generó que uno de sus principales motores, el turismo, tuviera que frenarse para evitar así la llegada del virus, aunque éste igual registró casos que hasta hoy siguen.
La crisis sanitaria por el coronavirus ha puesto a la isla en una alarma constante y pese a que hoy el territorio se encuentra investigando fármacos contra la pandemia, la otra cara se vive ante la escases de medicamentos para hacer frente a quienes están contagiados con covid-19 o para aquellos que tienen otros malestares.
Hoy en día no es extraño que, los medicamentos que quedan disponibles, son muy costos para los habitantes de la isla, que pese que determinó cerrar sus fronteras por el covid-19, la situación económica posiblemente fue uno de los puntos que generó que se abrieran los espacios.
Esa última decisión de seguridad sanitaria provocó también la llegada de las variantes, entre ellas Delta, hallada por primera vez en la India y que está entre las más preocupantes para los expertos. Hoy es la provincia de Mantanzas la más golpeada por el covid-19 en el territorio cubano.
La era de los Castro y la ayuda económica externa ya no está presente
Con la salida de Raúl Castro como primer secretario del Partido Comunista de Cuba y la ocupación de ese puesto de Díaz-Canel, la isla ya no tiene el mismo liderazgo y ha quedado en el recuerdo de muchos lo ocurrido en la Revolución, pero sin que ella esté presente de forma tan arraigada.
Fidel Castro sigue formando parte de ese recuerdo, pero la injerencia de esa familia ya no es la misma en el territorio, sumándose a esto que Cuba ya no cuenta con los mismos respaldos internacionales.
La Unión Soviética dejó de existir y Rusia está más ocupada en asuntos internos o en lo que tiene que ver con Estados Unidos, mientras que Venezuela, otro gran defensor de la isla, también tiene como prioridad resolver la crisis en su territorio.
Cuba, por lo menos en lo que respecta a grandes apoyos económicos del exterior, está cada vez más aislada, pese a que en lo político sigue siendo un factor de análisis.
Los cortes en suministros, especialmente en servicios de internet
Si algo facilitó que se conociera la noticia sobre las protestas de ayer en la isla fueron las redes sociales. Las primeras imágenes y relatos surgieron porque algunos usuarios en Facebook comenzaron a realizar transmisiones en vivo de lo que estaba pasando, lo que fue compartido en Twitter, WhatsApp e Instagram, entre otras aplicaciones.
El movimiento de ayer recordó al llamado “maleconazo” de 1994, cuando en medio de la crisis económica de aquel año cientos de personas con intenciones migratorias se lanzaron a la céntrica avenida Galiano de la capital cubana.
Hoy la isla amaneció con un apagón en los servicios de telefonía móvil, especialmente en lo que respecta a internet, el cual desde el mediodía de ayer estaba cortado, lo que ha dificultado conocer en tiempo real la situación en el interior del país y el desarrollo de las manifestaciones.
¿Cómo reaccionó el gobierno de Díaz-Canel?
Las masivas protestas de ayer fueron sorpresivas para el gobierno, haciendo que incluso Miguel Díaz-Canel también saliera a las calles junto con sus seguidores para hacer frente al importante número de personas que expresaban el rechazo a su administración.
Las imágenes de diversas agencias y medios de comunicación muestran detenciones, enfrentamientos con los policías y una oleada de gente con pancartas que criticaban a las autoridades.
Díaz-Canel dijo ayer «la orden de combate está dada: a la calle los revolucionarios» mientras hablaba a sus seguidores, quienes salieron también como contrarespuesta a las manifestaciones gritando «Viva Cuba» y «Viva Fidel».
Sin embargo, durante esta jornada, matizó en parte sus declaraciones, apuntando directamente a una intromisión extranjera, afirmando que Estados Unidos tiene «una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país».
El presidente cubano apareció muy temprano en cadena nacional para dar a conocer su gobierno ha tratado de «enfrentar y de vencer» las dificultades ocasionadas por las decisiones de Estados Unidos, según su versión.
Organizaciones y usuarios en redes sociales han reportado detenciones, represión de las autoridades policiales, así como el hecho que hay personas que se desconoce su paradero en la isla, un hecho que no ha sido aclarado por el territorio.
AMLO, Biden, Rusia y OEA; ¿qué dice la comunidad internacional por Cuba?
A nivel internacional, la situación en Cuba no ha pasado por alto. Hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador fue uno de los primeros en expresar solidaridad con el pueblo cubano, agregando que «creo que debe buscarse una salida mediante el diálogo, sin el uso de la fuerza, sin la confrontación sin la violencia».
«Tienen que ser los cubanos los que decidan porque Cuba es un país libre independiente y soberano, no debe de haber intervencionismo, no debe de utilizarse la situación de salud del pueblo de Cuba con fines políticos, eso debe quedar de lado», dijo en su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
López Obrador insistió que «veo que están interviniendo» agentes externos, añadiendo que «nosotros vamos a estar pendientes y dispuestos a ayudar al pueblo hermano de Cuba».
Por su parte, el presidente Biden pidió hoy «al régimen cubano que, en lugar de enriquecerse, escuche a su pueblo y atienda sus necesidades en este momento vital», sin responder a los señalamiento dados por Díaz-Canel ante la responsabilidad de las protestas por parte de Estados Unidos.
Asimismo, previamente la Casa Blanca respaldó «la libertad de expresión y reunión en Cuba, y condenaría fuertemente cualquier uso de violencia contra manifestantes pacíficos que están ejerciendo sus derechos universales», según lo expresado por el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan.
Por otra parte, Rusia advirtió hoy contra cualquier «injerencia externa» en Cuba tras las poco comunes protestas al interior de la isla, afirmando que el gobierno de Vladimir Putin seguirá «de cerca» la evolución en el territorio y en sus alrededores.
«Consideramos inaceptable cualquier injerencia externa en los asuntos internos de un Estado soberano y toda acción destructiva que favorezca la desestabilización de la situación en la isla», sostuvo en un comunicado la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zajárova.
El secretario general de la Organización de Estados Americano (OEA), Luis Almagro, expresó ayer su condena al «régimen dictatorial» de Cuba por «llamar a civiles a reprimir» y por promover la confrontación contra quienes protagonizan las protestas contra el gobierno.
«Reconocemos el legítimo reclamo de la sociedad cubana por medicinas, alimentos y libertades fundamentales. Condenamos al régimen dictatorial cubano por llamar a civiles a reprimir y a la confrontación contra quienes ejercen sus derechos de protesta», dijo Almagro en su mensaje en redes sociales.