Joe Biden se hizo con información clasificada sobre la guerra de Estados Unidos en Afganistán y otros asuntos de seguridad nacional cuando dejó la vicepresidencia en 2017, pero no enfrentará cargos penales, según un informe del fiscal especial de Estados Unidos publicado el jueves.
Los documentos incluían un memorando manuscrito dirigido al entonces presidente Barack Obama en 2009 en el que se oponía a un aumento previsto de tropas en Afganistán y notas manuscritas relacionadas con sesiones informativas de inteligencia y reuniones de seguridad nacional, según el informe de Robert Hur.
Biden dijo a un escritor que trabajaba en sus memorias durante una conversación en febrero de 2017 en una casa que alquilaba en Virginia que «acababa de encontrar todo el material clasificado abajo», según el reporte de Hur, que dice que la conversación creó «el mejor caso» para los cargos contra el mandatario.
Pero Hur refirió varias razones por las que no acusó a Biden, entre ellas que los documentos podrían haber sido llevados a su casa mientras era vicepresidente, cuando tenía autoridad para guardar tales documentos.
Hur añadió que Biden no habría sido acusado ni siquiera si no hubiera existido la política del Departamento de Justicia de no acusar a un presidente en ejercicio.
Miembros del equipo jurídico de Biden encontraron los documentos clasificados en la oficina del grupo de expertos del mandatario en Washington y en su residencia personal de Wilmington, Delaw.
Biden no pedirá edición del informe del fiscal especial sobre su manejo de documentos clasificados
El presidente Joe Biden no pedirá ninguna edición del informe del fiscal especial del Departamento de Justicia que investiga su manejo de documentos clasificados, informó la Casa Blanca el jueves, despejando el camino para su publicación.
El vocero de la oficina legal de la Casa Blanca, Ian Sams, anunció que la Casa Blanca había notificado al Departamento de Justicia que había completado una revisión del informe el jueves por la mañana. “En consonancia con su compromiso de cooperación y transparencia a lo largo de esta investigación, el presidente se negó a hacer valer su privilegio sobre cualquier parte del informe”, afirmó.
En horas de la tarde, el reporte fue enviado al Congreso, otro paso antes de ser publicado, dijo a The Associated Press una fuente allegada al asunto que pidió no ser identificada debido a que no estaba autorizada para hablar públicamente del tema.
El informe aún puede incluir algunas ediciones por parte del Departamento de Justicia de cualquier información clasificada.
La investigación, de un año de duración, se centró en la retención indebida de documentos clasificados por parte de Biden durante su etapa como senador y como vicepresidente. En 2022 y 2023 se encontraron registros confidenciales en su casa de Delaware y en una oficina privada que utilizó entre su servicio en la administración Obama y su llegada a la presidencia.
(Con información de La Jornada)