Un total de ocho misiles tierra-tierra fueron lanzados este lunes por EE.UU. y Corea del Sur, informa la agencia Yonhap citando al Estado Mayor Conjunto surcoreano.
Los proyectiles volaron al este, en dirección al mar de Japón. Siete de ellos fueron lanzados por las tropas surcoreanas y uno por las estadounidenses.
De acuerdo a los militares surcoreanos, la maniobra demostró la «capacidad y preparación» de Seúl para «atacar de forma precisa e inmediatamente» los puntos de lanzamiento y otros objetivos norcoreanos en caso de un ataque.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur señaló que «condena enérgicamente las sucesivas provocaciones de misiles balísticos de Corea del Norte e insta encarecidamente al cese inmediato de las acciones que aumentan las tensiones militares y agravan la inestabilidad de la seguridad en la península».
Por su parte, el Comando del Indo-Pacífico de EE.UU. afirmó en un comunicado que el ensayo balístico fue realizado «para demostrar la capacidad de las fuerzas combinadas de EE. UU. y la República de Corea a la hora de responder rápidamente a situaciones de crisis».
Un día antes, el mismo número de misiles balísticos fue disparado por Pionyang. Se trata del decimoctavo lanzamiento en lo que va de año. Previamente, Pionyang disparó misiles balísticos el 25 de mayo. Entonces, lanzó tres proyectiles en menos de una hora. En respuesta, las fuerzas de misiles de Corea del Sur y de Estados Unidos realizaron al menos un disparo cada uno.
A mediados de mayo, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, señaló que Corea del Norte estaba lista para llevar a cabo una prueba nuclear «incluso este mismo mes».
(Con información de RT)
