Largas filas realizaron jóvenes entre 15 a 17 años en el macrocentro de vacunación Caña Hueca, para recibir la primera dosis de la vacuna anti COVID-19 marca Pfizer. En este tercer día en que se inició la vacunación a este rango de edad, cientos de ellos acudieron desde temprana hora, sin embargo, las filas se extendían por todo el parque ante la importante afluencia de los más jóvenes.
Padres y madres señalaron que algunos provenían de otros municipios, pues ya esperaban el anuncio de la inmunización para ellos y prefirieron acudir a la capital del estado antes de esperar a que las instancias de salud lleguen a sus localidades.
Mediante un sondeo, familiares de los adolescentes también pidieron que los rangos de edad puedan disminuir aún más, como ha ocurrido en Estados Unidos, pues es importante que los menores se encuentren protegidos y así reincorporarse en su totalidad a las clases presenciales y a sus respectivas actividades.
“Qué bueno que los van a vacunar porque es por una buena salud y para que entren a clases y me da mucho gusto, así estamos protegidos”, dijo la señora Elsa Gómez.
“Ya la estábamos esperando, ya era justo que les tocara también a ellos, para que no les toque la nueva variante, a ver cómo nos va”, dijo la señora Cecilia Díaz quien esperaba a su hija.
“Ojalá que vayan a más municipios para que llegue la vacunación lo más pronto posible. También hay que decir que falta participación de mucha gente que ha hecho caso omiso de vacunarse”, lamentó el señor Porfirio Pineda, habitante de villaflores.
En tanto, el médico Enrique Ureña, titular del IMSS Chiapas, dijo que de acuerdo al Consejo Nacional de Población (Conapo) en la entidad existen 333 mil jóvenes entre los rangos de edad de 15, 16 y 17 años, mismos a los que pretenden para su inmunización.
